Es ampliamente reconocido que el aceite de argán es versátil en sus aplicaciones. Sus beneficios abarcan desde el cuidado de la piel y el cabello hasta el tratamiento de uñas y labios. Una de las cualidades más notables es la eficacia del aceite de argán en la reducción de cicatrices.
¿Te gustaría entender el motivo? A continuación, exploramos cómo se compara con otros aceites comúnmente utilizados para cicatrices y qué hace que el aceite de argán sea tan único.
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¿Aceite de argán o rosa mosqueta? Diferencias y beneficios
Si alguna vez te has preguntado "¿Debo usar aceite de argán o rosa mosqueta?", estás en el lugar correcto. El aceite de argán, a menudo referido como oro líquido debido a su valor, es uno de los aceites más preciados a nivel mundial. Aporta numerosos beneficios para la piel y el cabello.
Por otro lado, el aceite de rosa mosqueta también es ampliamente reconocido, especialmente en el tratamiento de cicatrices. Aunque ambos aceites comparten propiedades, existen diferencias notables que podrían inclinar la balanza a favor de uno u otro. Basándonos en estudios científicos y pruebas dermatológicas, el aceite de argán muestra un perfil más completo en términos de antioxidantes y ácidos grasos esenciales.
Procedencia y extracción del aceite de argán y de rosa mosqueta
El aceite de argán proviene de Marruecos, hogar del árbol de argán, que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1999. El árbol de argán pertenece a la familia de las sapotáceas y se caracteriza por sus flores pequeñas y amarillas.
El preciado aceite se extrae de forma artesanal de su fruto, similar en tamaño a una nuez, mediante un proceso de prensado en frío.
En contraste, el aceite de rosa mosqueta se deriva de la mosqueta (rosa eglanteria), un arbusto originario de Europa pero extendido globalmente. Este arbusto se distingue por sus flores rosadas.
Las semillas piramidales de sus frutos, conocidos como escaramujos, son prensadas en frío para obtener el aceite. A diferencia del aceite de argán, la extracción del aceite de rosa mosqueta puede ser más industrializada, y en ocasiones, el aceite es sometido a procesos de refinado a altas temperaturas, lo que podría afectar algunas de sus propiedades.
Componentes del aceite de argán y de rosa mosqueta
Ambos aceites comparten una composición rica en vitamina E y ácidos grasos como el oléico y linoléico. De hecho, aproximadamente el 80% de su composición es similar. Sin embargo, cada aceite tiene sus propios componentes distintivos.
El aceite de argán, además de su riqueza en ácidos grasos y vitamina E, contiene polifenoles, fitoesteroles, lupeol, gamma y delta tocoferol y escualeno, componentes que contribuyen a la hidratación y flexibilidad de la piel, así como a la producción de queratina. También destaca por su capacidad antioxidante y antienvejecimiento.
El aceite de rosa mosqueta, por otro lado, contiene vitaminas A, C, B1 y B2, además de flavonoides, taninos y betacarotenos.
¿Qué aceite es más eficaz para las cicatrices?
Aunque ambos aceites son beneficiosos para diversos problemas cutáneos, hay ciertas diferencias a considerar. El aceite de argán posee una fórmula más estable, manteniendo sus propiedades durante aproximadamente 9 meses una vez abierto, mientras que el aceite de rosa mosqueta puede perder efectividad después de tres meses.
Además, la textura del aceite de argán es más ligera, se absorbe rápidamente y no deja residuos pegajosos en la piel. En cambio, el aceite de rosa mosqueta puede ser más denso y tardar más en absorberse.
¿Qué tan comedogénico es el aceite de argán?
Es natural tener reservas sobre el uso de aceites en el rostro, especialmente si tienes piel propensa al acné. Pero aquí hay una revelación: el aceite de argán es no comedogénico. Sí, has leído bien. No obstruye los poros y es un potente aliado para reducir la inflamación y las marcas del acné, además de prevenir y reducir las estrías.
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